La Mercería – Estudio Capdevielle – Fuente



La Mercería es un innovador concepto de negocio, que sin duda, hoy se reconoce como una marca.

El local más representativo es el que se encuentra en pleno corazón de Palermo Soho, en la emblemática esquina de Honduras y Armenia.

Sus propietarios son personas que permanentemente actualizan sus conocimientos sobre  diseño y nuevas tendencias. “…Para nosotros, el titular de La Mercería es una fuente de motivación permanente, ya que sabe mezclar lo glamoroso con productos que son comercialmente sustentables y que tienen buena rotación…”

La propuesta, esta orientada hacia el público femenino y su oferta de productos fusionan el mundo de la decoración, la indumentaria, los accesorios, y las fragancias, con tal profusión de elementos y de ambientes que convirtieron el lugar en un espacio  realmente único.

La exhibición es dinámica. Se redefinen permanentemente las ubicaciones de  bolsos,  sombreros,  almohadones,  pantallas, flores, collares o  lencería, y se modifican creativamente   los soportes de producto.  Este montaje, escenográfico y efímero genera una imagen de constante movimiento.

“…La relación de nuestro Estudio con los propietarios de  La Mercería comenzó en el año 2000 Diseñamos entonces  un local mayorista de venta de accesorios de la moda, orientado a diseñadores del rubro. Ofrecía  tendencias: piedras o botones diferentes, galones exclusivos, flores, plumas, cintas, etc. etc. Un Concepto de negocio singular por su mercadería y por  su original exhibición. Junto a ellos, estudiamos exhaustivamente las distintas alternativas de presentación, buscando las formas más atractivas para  los ojos del observador. Resulto tan llamativo el conjunto, que la gente que pasaba por el lugar fotografiaba las vidrieras. Era un local de escasas dimensiones, pero de vanguardia.  Trabajamos con la firma ininterrumpidamente, desde entonces, diseñando sucursales de esa cadena inicial. Durante ese tiempo pudimos profundizar y conocer a fondo  las inquietudes que luego se plasmaron en nuevas obras.

Pasado un tiempo, su titular, visualiza una nueva etapa para su  concepto de negocio y toma la iniciativa de instalarse en la casona de  Palermo.

En infinitos y recordados «brainstorming”,  se define la  identidad de la nueva la marca,  y  nace “La Mercería”. Su imagen es la síntesis del trabajo de  un equipo multidisciplinario.

Comenzamos la obra, desmantelando un restaurante que existía en el lugar, al mismo tiempo  apuntalamos la vivienda para  trabajar sobre la estructura de la misma. Sólo  demoliendo paredes portantes  logramos la circulación deseada. La propuesta fue generar  espacios diferenciados entre si  y a la vez integrados, para no perder la idea de espacio total. El mismo principio se considero meses mas tarde, cuando se anexo la planta Alta que funcionaba como vivienda.

Recibimos  esta casa en excelente estado de conservación, por lo que fueron rescatados  los pisos calcáreos y los de madera, resaltadas las molduras interiores y exteriores y conservadas las puertas, ventanas, postigones y persianas. En todo el desarrollo del proyecto, tratamos de armonizar las necesidades comerciales con la conservación de la imagen de la vivienda original, respetando al máximo sus características particulares.

El armado de vidrieras, fue condicionado por las aberturas propias de la fachada. Utilizamos cada espacio abierto hacia la vereda para establecer la comunicación con el posible cliente.
El mobiliario , elemento fundamental para el soporte de tan variada mercadería, fue diseñado especialmente para La Mercería y construido en talleres de carpintería . El resto del equipamiento lo componen en general mesas, vitrinas y diferentes elementos, comprados en mercados y tiendas vintage. Todos cumplen con la condición de ofrecer  flexibilidad en su uso, y complementar la atmósfera teatral buscada.  Los colores, texturas,  entelados o empapelados de las distintas ambientaciones fueron cada uno un tema de resolución en equipo.

Muy importante, es definir el concepto de iluminación. Otorga el carácter de cada ambiente, su propio clima.  En este caso, armonizamos  el uso de las luminarias contemporáneas con arañas y aplique de otros tiempos”.
La música, los aromas del lugar, y algunas expresiones artísticas, complementan el estímulo para despertar la sensibilidad del cliente. La Mercería se destaca por su feminidad, eclecticismo y glamour, en sintonía con las tendencias del mundo, y el Estudio Capdevielle – Fuente logró interpretar ese lenguaje tan particular.